Nos pasa a todas, incluso a las mujeres que le dedican muchas horas y cuidados a sus cabelleras: siempre nos levantamos un día con la sorpresa de un bad hair day; es decir, uno de esos días en los que tenemos realmente los pelos de punta, descontrolados, indomables o con frizz; a veces sucede porque no estamos usando los productos adecuados para lavar el cabello; o porque el corte o el peinado que nos hicieron en el salón de belleza ya perdió sus formas. Otras veces, el factor ambiental (la humedad, el frío, el calor), cambian la textura del cabello, sin que podamos hacer mucho por evitarlo. “Pero siempre tenemos recursos para que la elegancia triunfe y enfrentemos el día con nuestro mejor look”, asegura Mónica Ceño, creadora del centro de belleza e imagen The Lab Room, quien nos ayuda con su consejos.
El boom del gel
Ya anticipamos que es el protagonista de uno de los looks más hot de la temporada: el regreso triunfal del gel. Y es un aliado indispensable para esas mañanas en las que está claro que tu cabello no quiere cooperar para que salgas a la calle como una diosa.
El efecto que produce el gel es indiscutido: la cabellera queda prolija, controlada, disciplinada, como si recién te acabaras de peinar… Y como si todo eso fuera poco, ¡está de moda!
Peina tu cabello todo hacia atrás con gel; no uses una gran cantidad: hay que probar con poco, y aumentar de acuerdo al efecto que quieras lograr. Luego, puedes sujetar tu cabello en una coleta (ideal si vas a trabajar), o dejarlo suelto si está presentable, para un look más informal.
Recuerden que hay geles específicos para rulos, que activan las formas onduladas; pero si el cabello está especialmente rebelde, quizás sea mejor, con la ayuda del gel, lograr un lacio total.
• Cuidado: no uses el secador de cabello si te has aplicado gel. Y si quieres un efecto mojado, aplícalo mientras el cabello esté húmedo.
• Para trabajar con gel, es mejor usar el peine de dientes anchos; no sirven los cepillos.
• Los geles que contienen base acuosa son menos nocivos que aquellos que contienen alcohol.
Las coletas, en todas sus versiones
Es cierto que éstas no son aptas para todas las mujeres, pero sí para las que se animan: volvieron las pigtails, las dos coletas, se usan como cuando íbamos al colegio. En su versión adulta, se hacen bajas, y puedes dejar unos mechones sueltos así como al descuido, que caigan informales a los costados de tu rostro.
Y por cierto, el clásico que vuelve esta temporada, es el aliado eterno de las mujeres: la coleta alta, que, con un buen accesorio, nos salva cuando no es posible ningún otro peinado prolijo.
Aunque se usan también las coletas bajas y tiradas hacia un costado, no es la mejor opción si tu cabello amaneció indomable.
• Un mouse anti-frizz te ayudará a dejar el cabello en condiciones antes de sujetarlo.
• No te recojas el cabello mientras está mojado, porque te quedará marcado cuando lo sueltes.
• Busca un accesorio chic y prolijo para sujetar tu coleta, por ejemplo, de tela. Si hace juego con tus aretes… ¡mucho mejor!
Vinchas, pañuelos y sombreros
Que son la sensación de la temporada veraniega, ya lo sabes. Pero que, además estos accesorios te pueden salvar en uno de esos días… ¡no lo olvides!
Claro que debes elegir versiones discretas si tienes que salir a trabajar; por ejemplo, hay vinchas lisas, sin brillos, en colores neutros, que pueden sujetar un flequillo descontrolado o unas mechas rebeldes.
Los sombreros son perfectos para una salida elegante… es más complicado si vas a trabajar, porque tendrías que sacártelo luego de llegar.
También valen los pañuelos y las bandanas colocados en forma de vincha; pero también puedes optar por llevarlos como un turbante, de modo que te cubra casi toda la parte superior de la cabeza.
En tu bolso…
Si vas a pasar muchas horas fuera de casa, debes llevar algunos elementos en tu bolso que te pueden salvar el día si el pelo se te descontrola sin aviso previo.
• Crema sin enjuague
Con la ayuda de una crema para peinar sin enjuague, es posible que logres modelar el cabello rebelde incluso sin la ayuda de un peine, sólo con los dedos.
• Horquillas, cintas elásticas, broches
Todo lo que te pueda ayudar a sujetar tus mechones rebeldes, y te permita improvisar chignones (rodetes) o coletas.
Elizabeth Levy Sad es editora y periodista. Trabaja como editora para iVillage, y colabora con investigaciones sobre temas de Psicología en la revista Más Salud . Sus textos han aparecido en Toward Freedom, In-Lan, Veintitrés, y el diario Página/12 , entre muchas otras publicaciones. Actualmente, colabora con las ediciones en español de Life & Beauty Weekly .
